Overview

El proyecto expositivo “arraigados y enraizados” pretende acercar la necesidad que tiene el ser humano a aquello que nos consolida y arraiga. Esta sociedad que nos lleva al mundo virtual y digital, al desarraigo, nos aleja de aquello que verdaderamente nos enraíza. El término enraizado hace referencia a fijar raíces en sentido simbólico, cuando esto es así, afirmamos que alguien está enraizado, arraigado a un determinado lugar. Las raíces de una persona hacen referencia a sus cimientos culturales y afectivos: su familia, sus costumbres, su lugar de nacimiento o el enraizamiento a otro lugar. Destacaría la importancia de estar o sentirse arraigado; buscar nuestros orígenes o echar raíces. Arraigado en el pasado, en el presente o echar raíces en el futuro, pero buscamos ese sentimiento que nos identifica, ese entorno que nos rodea, y esas raíces que nos sustentan y dan seguridad.
María E. Santiso presenta en su obra esa mirada hacia el pasado, aquello que ya no vemos pero que forma parte de nuestra historia. De dónde venimos, esa mirada a la niñez, a la juventud…que nos refleja nuestra historia única y personal. Santiso nos presenta una obra más intimista y contenida. Desde la sencillez de los materiales grafito sobre madera, resalta la técnica del dibujo, y trata de trasladar y reflejar esa mirada hacia lo que somos pero que no vemos, que se esconde pero que podemos intuir. Los cuerpos, la figura humana tienen un papel fundamental en su obra, su presencia sugiere una emoción, un sentimiento contenido de esa búsqueda y mirada de nuestra historia personal.
Joxan Iza a través de sus pinturas nos muestra el entorno que nos rodea, y nos envuelve que nos hace sentirnos enraizados a un espacio, pertenecientes a un contexto. Pero ese entorno puede ser vivido de manera estresante, convulsa, superficial o por el contrario un entorno vivido sereno, pausado y enraizado. Estos sentimientos los expresa en sus lienzos, lugares que nos llevan a acercarnos a la naturaleza, al entorno que nos rodea, nos caracteriza y nos identifica. Iza nos abre una ventana para vivir en profundidad e intensidad nuevos entornos, lugares llenos de dinamismo y color. La variedad de técnicas enriquece su expresión artística que encontramos en sus obras paisajísticas, expresan ese entorno al que estamos arraigados.
Federico Osorio nos presenta a través de su obra una mirada contemplativa. Nos invita a pararnos, observar, contemplar, percibir la belleza, pero para ello necesitamos estar enraizados, asentados y consolidados. Sus esculturas talladas en madera, elemento natural, son como pilares que se enraízan. Guarda la esencia, el origen, cuidando ese arraigo, esa raíz que nos sustenta. Sus esferas nos invitan a la vibración del color, la creación y el origen de la vida. Desde su perspectiva espiritual y meditativa, su mirada parte de la relación y la armonía del ser humano con la naturaleza y la creatividad, un enraizamiento presente en el aquí y ahora.
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